Una tendencia es un mecanismo social que nos hace inclinarnos a una cosa u otra. Si preferimos colores cálidos o fríos, si nos gustan las texturas u optamos por telas lisas. Muchos son los factores que se deben tomar en cuenta para decidir cual será el próximo llamado de moda.
Pero, ¿quiénes toman estas decisiones?
Existen compañías especializadas en marketing y publicidad quienes trabajan con personas expertas en análisis de tendencias, llamados: Coolhunters.
Coolhunters
Son los encargados de recolectar información y analizar las costumbres, intereses y gustos de la sociedad. El fin de ello, es examinar rigurosamente el comportamiento de consumismo y moda actual para hacer predicciones de las tendencias de moda que podrían ser aplicadas en diseños futuros.
Estas personas son especialistas en diferentes áreas, ya sea diseño, sociología, marketing, psicología y mucho más.
Influencers, Early Adopters, Late adopters…
Luego de tener los datos necesarios, los Coolhunters siguen un proceso para encargarse que dichas tendencias lleguen a ser moda.
Se inicia tomando a personas denominadas Influencers, ellos tienen impacto sobre determinadas comunidades, que por diversos motivos los imitan. Por ejemplo: Un artista, utiliza cierto tipo de lentes de sol, algunos seguidores mostraran interés e incluso buscarán adquirirlos. A estas primeras personas se les llama Early Adopters, y ellas ayudan a que la tendencia se vaya expandiendo. Una vez se ha generalizado, se ha logrado el objetivo, sin embargo, no termina ahí.
Cuando la tendencia ya ha tenido un tiempo de duración, salen a la luz otro grupo de personas, designados Late Adopters, ellos toman la tendencia al último para que finalmente de esfume.
Pero por supuesto, estas compañías de marketing ya tienen en puerta la próxima tendencia, es más, tienen asegurados y avanzados los siguientes dos años.
¿Qué opina Ryss?
“Es interesante ver el proceso que existe para las nuevas tendencias. Podemos notar una especie de círculo, ya que, todo depende de lo que realiza la misma sociedad. Es un hecho que cada persona tenga sus propios gustos y estilo; lo que ayuda a que haya variedad en tendencias. Las personas que experimentan con las tendencias a su manera, son de mucha inspiración para el cambio de ellas. Por otra parte, las son muy importantes para los negocios del mundo de la moda, ya que ayuda a muchas compañías a entender qué es lo que quiere el público en su momento”.